Si estás aquí, seguramente sea porque no seas una invitada perfecta y te hayas dicho a ti misma cosas como: «Yo ese vestido no me lo puedo poner» / «Tengo mucha tripa» / «Con mi cuerpo no sé cómo va a quedar» …

A menudo, cuando me escribís para encargar vuestros MissDaisy me doy cuenta de que nos hablamos muy mal a nosotras mismas y de que buena parte de ello, además de nuestra educación, es la gran presión a la que estamos sometidas con las redes sociales.

Hasta hace poco yo también he sido así. Aquí os dejo unas herramientas básicas de supervivencia que te van a ayudar a ser más feliz:
1- Cuando te asalte un pensamiento o comentario negativo hacia tu cuerpo, bloquéalo. Cuando tu mente te diga: «No me puedo poner eso» , sustitúyelo por un: «Me quedaría mejor esta otra prenda». Evita el «no» delante de cada frase e intenta hablarte siempre en positivo. Esto es fundamental. Eres la persona con la que más tiempo pasas … Te mereces caerte bien 🙂
2- No te obsesiones con la talla. He usado la 38 toda mi vida. Hasta hace unos meses. De hecho, este vestido que veis en la imagen es una 42. Es más. Hace un año, jamás habría cogido un vestido dos tallas más grande que la mía por puro orgullo. Pues, ¡sorpresa! (Sé que parece obvio pero a mí me ha costado verlo) La talla sólo es un número y, por lo general, si cogéis una talla más, os vais a ver mucho mejor y sentir más cómodas. Os aseguro que nunca me he visto mejor con la ropa de verano que ahora.
3- Mírate en el espejo. Cada día. Destaca ante ti misma eso que te gusta y lo que no te agrade, no lo odies. No te voy a pedir ni que lo aceptes, ni que lo ames. Simplemente con que no lo odies, me vale.
4- Cuando te cueste ponerte el bañador, echa la vista atrás a tu verano anterior. ¿Cuántas chicas viste en la playa con «cuerpazo Instagram»? Pues eso.
5- Hacer ejercicio es sano si lo hacemos por salud. No con la obsesión de tener un determinado tipo de cuerpo. Así sólo conseguiremos frustrarnos y abandonar a los pocos meses. Eso sí, hazlo siempre porque a ti y sólo a ti, te apetezca.
6- Igual de importante es tener sano el cuerpo, como la mente. Invierte en un coach o un psicólogo si tus complejos no te permiten hacer ciertos planes. Te dará herramientas para afrontar tu día a día, ganar confianza y quererte más.
Os propongo que cuando vayáis a comprar vuestro look de invitada o ropa en general, tengáis esto en mente, que hagamos un ejercicio de mentalización y que dejemos atrás todos esos comentarios negativos. A lo mejor no somos la invitada perfecta pero, ¿qué hay de malo en ser imperfecta?
Broche y pendientes: Miss Daisy
Vestido: El Corte Inglés
Sandalias: MiMao